Olvídalo

Oyeeeeeeee, no sabes lo que ha pasado? Ya se! No me digas nada…que el trabajo te agota, que el día es largo y llegas cansado a tu casa, que amas el silencio de la noche, que odias el teléfono de madrugada y blablabla y yo te creo aun sabiendo que no es cierto, o si, pero a medias, Y las medias pa’ los pies, no? Sabes? No, que vas a saber, si estar contigo es estar sola dos veces diría el Sabina, pero vamos que somos dos partes, dos polos opuestos atraídos por la ley de la gravedad de nuestros sexos, uffffff vale, vale, ya sé que no hay nada como tenerte en mi cama, que es ahí cuando me olvido que existo y es ahí cuando te arrebato los minutos que te faltan pero Oye, me estás cargando? El sexo no lo es todo! O si? No sé… me permitiré la duda contigo jajajajajajajaja No sabes lo que me pasó? Ha sido un día complicado, un día no, más bien, un mes y bueno de aquí pa’ allá, el hospital, los quehaceres diarios, el marido de mi madre por atender, el desgano, los nervios, el puto trabajo, el agua refrigerante del auto, la humedad espantosa de agosto, el frío, Odio el frío te lo he dicho? ... el caso es el siguiente agosto me ha sacudido y no viene a cuento el por qué si ya lo sabes, el tema es que en medio de esa locura diaria siempre venías a mi, a veces vestido de príncipe, otras de canalla, rara mezcla en ti, tan particular por otro lado, amo tus dos caras, es como decir la cara oculta de la luna me seduce y la cara visible me enamora, y tanto que me puedes… que a qué me refiero? Pues a eso, que te basta levantar la mirada pa’ encontarte con mis ojos, que soy débil contigo, Oye! No te hagas el bobo! Si de sobra sabes que no hay mayor tentación pa’ mi que cuando llegas, para colmo tienes el descaro de usar botas de acero para avisar que llegas… Qué cabrón! Es como decirme…Oye Niña… abre esa puerta ya, ahora mismo, no ves que llego pa’ rescatarte… rescatarme? Pienso… vamos un rescate nos salva de la muerte sin embargo TU vienes y dejas el olor de tu piel desparramado por todos los rincones de mi alma y luego te vas… ay! Será mi masoquismo? quien sabe… soy terca ya lo sé, pero cerrarte las puertas en las narices provocaría tremendo cargo de conciencia en mi que luego iría a pedirte las pertinentes disculpas y tu me dirías tranquila Cariño, sabes que me encantas… bue… como te decía ya casi olvidé a lo que venía… ahhhh si, ya lo recuerdo… me quedé sin entradas, pos nada, una boludez, comparada con estas ganas de tenerte, esta noche, conmigo.

Olvídalo, no me hagas caso, ya es tarde, creo que me iré a dormir...