A Tres Horas...

Un disparo directo a las sienes
Buenos Aires, primero de octubre,
una mirada manosea y descubre
la hoguera extinguida que ya no tiene

ni cenizas, ni restos, ni lumbre.
Tenaz olvido violentando los genes
Sola como un riel huérfano de trenes.
El sol pregona su mala costumbre

de buscar colores tras un aguacero,
Alguien tiembla de frío en primavera,
e injuria el caos que habita en los renglones.

No quedará nada de vos en enero,
Se detendrán las agujas de la espera
y el recuerdo migrará a otros colchones.

...

Extraviado en un mundo de túneles y pasillos,

atajos y bifurcaciones, entre paisajes turbios

y oscuros rincones, el hombre tiembla

ante la imposibilidad de

toda meta y el fracaso de todo encuentro.

Ernesto Sábato.

Fragmentos que me robó otra boca...

No hay nada más bello

que lo que nunca he tenido.

Nada más amado

que lo que perdí.

Perdóname si

hoy busco en la arena

una luna llena

que arañaba el mar






...

J. M. Serrat.

Bebiéndome el vacío

Llueve...

Desdibuja el cristal una lágrima seca,

húmedo el suelo que no pisaron nuestras huellas,

sedientos los oídos,

Susurros de un naufragio que no pudo ser,

Tu voz, el eco que recorre cada arista

de lo que esconden mis huesos,

El ayer una daga que no asesina

pero hiere esta memoria amnésica

de tantas palabras mudas que se llevó

la brisa cálida de lo que nunca nos perteneció.

-Dueles-

...

Amo el amor de los marineros

Para que NADA nos AMARRE,

que no nos UNA nada.

Ni la PALABRA que aromó tu BOCA,

ni lo que NO dijeron las palabras.

Ni la FIESTA DE AMOR que no tuvimos,

ni tus SOLLOZOS junto a la ventana.

Para que NADA nos AMARRE,

que no NOS una nada.

Amo el AMOR de los marineros

que BESAN y se VAN.

Dejan una PROMESA,

no VUELVAN nunca MÁS.

En cada PUERTO una mujer ESPERA;

los marineros besan Y se van.

Una NOCHE se acuestan con la muerte

en el lecho del MAR.

Desde el FONDO DE TI y arrodillado,

un niño TRISTE como YO nos mira.

Por esa vida que ARDERÁ en sus VENAS

tendrían que AMARRARSE NUESTRAS VIDAS.

Por esas MANOS, hijas de TUS manos,

tendrían que MATAR las manos MÍAS.

Por sus OJOS abiertos en la tierra,

veré en los TUYOS lágrimas un día.

AMO el amor de los marineros

que besan Y SE VAN.

Amor que puede ser ETERNO

y puede SER fugaz.

...

(la pluma de Neruda, el quiebre del Sabina y el Cabo de Gata, a algo más que 20 nudos, por un mar que paladeaba aquel agosto tan particular)

Esto era el Todo

Inapetencia de vos


Diciembre, huellas al aire, nada!
Un nombre escrito en el viento
Sólo instantes, otra boca el tormento
Un sueño desgarrando mi almohada.

Risas descuidadas, Penélope roída
Un pasado deshaciéndome las ganas
Un haz de luz intrépido en mi ventana,
Jirones de mil lunas descocidas.

Una estación huérfana de cercanía
Tu cuerpo una sombra en manuscrito,
un desván de leyendas sin mitos
y vos paralelo a mi terca letanía.


Asaltándome


Justiciero el destino y sus proezas
El camino fue haciéndose a los gestos
La cruz que cargaba con los restos
Fue verbo inconjugado de certezas

Y llegaste con rimas destempladas
Tan poquita cosa era yo por esos días
Un despiste malogrado decidía
Tatuarle tu nombre a la madrugada.

Caballo de cartón, voces lejanas
fotos amarillas, clavos en los pies
Desnuda del derecho y del revés
Fui haciéndote un hueco en mi cama.


Desde adentro

Irrumpiéndome las horas desvestidas
Fui más tuya, que mía, que cualquiera
La pasión es un alud que desespera
La distancia una mirada pervertida

En el centro de mi centro haz anclado
Maldito capitán, adicto al mar adentro
Mapamundi con rutas a un encuentro
Presente imperfecto de mi pasado

La sangre corrompida de tu boca
Hizo eco en un laberinto sin desvío
Siete lenguas besando el desvarío
Te amaba, lo digo porque me toca.


Réquiem


Campanadas que silencian por la tarde
El resquicio donde huyen los soldados
Lágrimas, gritos, ruegos, y a mi lado
El punto más oscuro y más cobarde

Más después que antes ganó la noche,
sepulcro de un tal vez enfermizo
Nos dieron las doce, roto el hechizo
El príncipe fue sapo y fue fantoche.

María de los lamentos desterraba
La pasión del hueco de los muertos
La verdad en el espejo fue un incierto
A dos velas un Nosotros naufragaba.


Adivinándote en las Sombras


Verte ha sido la batalla más pagana
El renacer del infierno en tu mirada
El dejo de un piélago en sudestada
La guerra de un por qué me da la gana

Ángel maldito de mis putos sueños
Proa y popa, corazón a la deriva
Cenicienta tan de nadie, tan esquiva
Agüita de Mar andaluz sin dueño

Hasta la médula de mi fibra más sensible
Trashumante el marino de mi vida
El pañuelo del adiós sin despedida
injurió la tempestad de un imposible.


SinTiGo

Y la ausencia magullando en el tejado
Amnésica las lunas de septiembre
La mentira despiadada de mi siempre
Fue promesa en unos labios desquiciados

Mírame que el olvido no se entera
Que por más que llueva en el desierto
No hay vida que reviva éste mar muerto
ni otoños que destruyan primaveras

Bébete a sorbos la leche de mis dedos
Que hoy me invade la cruel melancolía
Y hasta puede suceder que algún día
“logre ganar el quiero sobre el puedo”.

...

Arañando el Recuerdo...

70 horas no es tanto, ni mucho, ni poco, ni nada, todo depende del cristal con el que se mire, curioso… le he besado todas las caras a la luna durante tres días y tres noches.
Había en el aire el sabor amargo de las despedidas que no se dicen… teníamos los pies cansados de no ir a ningún lugar y las ganas se dormían con el vaivén del oleaje macabro de un inminente olvido… no sé cuanto tiempo me he bebido tus ojos… sabían a mañanas sin horas y a días interminables… había senderos que invitaban a la huída y un regazo que me pertenecía como la libertad al preso, cierto es que no todos los caminos conducen a Roma... estábamos ahí tan unidos y tan ajenos, maldito el destino y un pecado tu cuerpo… debería de haberme arrojado al vacío y mirarte con el alma incrustada en la nuca… debería, debería… ains…

Nunca antes había sentido la necesidad irreparable de amarrarme a un puerto, nunca antes había odiado tanto el tic tac de un reloj insolente que no se detiene… nunca antes me había planteado la posibilidad de arañarte las ilusiones… Mi vida te hubiera dado si tan solo tu silencio me lo hubiese pedido…

Era un agosto cálido, el mío suele ser frío, hostil, mal parido… el caso es que me embriagó la bruma del mar… atrapada por un red invisible me dejé llevar… presa fácil pa’ ti… predecible el choque… no es igual caminar en tierra firme que sobre las olas que rompen en este mar de arenas movedizas, no sabe la casualidad que es un invento, no conocen los pájaros le desidia de andar dejando huellas de sangre en las piedras, ignora el historiador que hubo una historia entre nosotros, no da lo mismo 70 horas que una vida, ni es igual callar que decir… ay! Si se aprendieran a descifrar las miradas no haría falta ni una sola palabra…

En un intento absurdo por arrancarme de raíz el instante perpetuo caí en la cuenta de que el olvido es traicionero… Déjame en paz, Vete, saborea otras bocas, hazle el amor a cualquiera que pretenda todo de ti… poca cosa me queda por darte, la nada es un hueco en el que no reparas… vete yendo por donde viniste, demasiado ruido me aturde, demasiado silencio me mata…

Haz el favor de quitarme la espina sin tocarme que no resisto al roce de tus manos, sin tan solo el alba supiera incinerar los restos y arrojarlos al viento…
Maldito cabrón… te he llamado a gritos en noches de insomnio, borracha con el resabio ácido de una luna llena en agosto…

Te debo una despedida con velas y ramitos de violetas, te debo las risas que dormían ante el miedo, te debo el acuse de recibo del encuentro.

Haz sido el más bello sueño que jamás he soñado...

y qué se yo... tantas otras cosas...

...

Tanto Ruido...

Debería de haberte pedido que te lo lleves todo



























...