Y puede que no tenga nada...

Tengo un galón con tu nombre
como patria para mis sentidos.

Una dudosa vanidad
que se marea en la primer vuelta
de este carrusel.

La memoria desmemoriada
que me recuerda que prometí
olvidar el camino de regreso.

Tengo casi nada que es
poco y demasiado,
las manos torpes y la mirada
perdida en el horizonte.

un verso huérfano
de palabras vestido con el
desnudo de las metáforas,
los pies descalzos
y mil espinas clavadas
en el silencio lúgubre
de esta noche desvelada.

Tengo la mala costumbre
de embriagarme
hasta perder la noción y
el equilibrio que necesito para
subsistir a este tormento
de llevarte dentro de mi alma.

...

Puedes llamarme loca

Ya pasó la media noche, el calor agobia, a metros de mi casa suena una sirena de bomberos… aun no me dan ganas de irme a dormir… Pienso en darme un baño… enciendo un cigarrillo y ya van… estos dos últimos días fumé como si no existiera el después… que va! La cerveza está helada, se acaba de ir mi amiga… no es que te extrañe, ni que necesite de vos… pa’ ser sincera esto de buscarte es más un juego que un sentimiento desbordado, o no? Me figuro el ayer… te echo de menos, te llamo, te miro a la distancia, ayer… ufff… que lejana suena esa palabra hoy en mis labios, rememoro las imágenes inventadas de un nosotros que no existió… acaricio tu nombre… ¡Qué boba! Hoy me apetece tener la melancolía que hace un tiempo atrás me usurpaba hasta la sangre… me siento inútil y cursi hasta el ridículo… pero necesitaba que sepas que hoy tal como ayer aun queda perenne la nada que compartimos… puedes llamarme loca pero añoro el dejo de tristeza que me invadía entera cuando te pensaba.




A veces me da por escribirle al espectro que habita en los escondites de mi alma.

…